(“Reunir lo disperso”)
El ecosistema de aprendizaje musai transforma y democratiza la educación al reunir la información que sustenta el conocimiento de la humanidad en todas las vías de desarrollo bajo un núcleo central para su libre acceso.
Los seres humanos aprendemos de forma autónoma, aunque no siempre de manera efectiva. Caemos en errores y mitos, como considerar la educación un castigo o creer que el conocimiento es algo que se nos imparte y no algo que construimos.
A menudo, se aprende información errónea o se cree que el aprendizaje solo puede ocurrir en un entorno escolar donde debemos adquirir conocimientos que se puedan evaluar en un examen o que tengan una aplicación directa para generar ingresos.
No es una acumulación de datos que podamos recitar de memoria, sino una construcción personal que atraviesa varias etapas y requiere de diferentes modos y herramientas de aprendizaje.
Nos ayuda a ser consientes de lo que aprendemos y como lo aprendemos implica una reflexión constante sobre cómo adquirimos conocimientos y qué hacemos con ellos.
Es hacerse cargo conscientemente de su educación y no delegar la responsabilidad y con ella el poder de decidir.
La sabiduría no se trata solo de poseer un conocimiento teórico, sino que se debe poner este conocimiento en práctica. Si desea desempeñarse como ingeniero, abogado, médico, artista o cualquier otra disciplina, debe prepararse para ello. Luego de poseer un buen conocimiento teórico de la rama que estudia, entonces comenzará la práctica de lo que ha aprendido. La práctica trae la excelencia.
El ser humano tiene la libertad de decidir (libre albedrío) y para eso el ingrediente es ser culto, estar bien instruido, ser capaz, mirarse al espejo y decir yo puedo porque sé.
La transmisión de conocimiento para instruir y desarrollar las habilidades y las capacidades como elemento de las artes, es fundamental para el desarrollo de la vida humana y el uso en cualquier área de aplicación.
La importancia del aprendizaje radica en adquirir conocimientos, habilidades y competencias que nos permiten expandir nuestras perspectivas, mejorar nuestras capacidades y convertirnos en individuos íntegros.
Desarrollar las habilidades en las diferentes áreas de conocimiento sin la presión de un diploma permite aplicarlos según el sector de interés, enfocándose en hacer lo que realmente apasiona y no en hacer algo porque toca.
En musai solo es necesario elegir el área y actividad en la cual desea desempeñarse, capacitarse, a su propio ritmo, a través de metodologías diseñadas para todos los tipos de aprendizaje, para luego aplicar los conocimientos adquiridos. Como aprendiz, aprende el uso y función de las materias, herramientas y técnicas. Cuando demuestra sus habilidades, se convierte en un “compañero del oficio”, y cuando adquiere una habilidad excepcional que aplica al servicio de la humanidad haciendo lo que le apasiona, se reconoce como un “maestro del oficio”.
En Sinapp coexisten los tres niveles, siendo siempre unos quienes enseñamos a otros mientras recibimos conocimientos de otros más y en conjunto somos compañeros de oficio en las tareas que crean o mantienen nuestra realidad.
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